Es una pregunta que muchos ejecutivos se hacen cuando están evaluando opciones al momento de querer contratar a un tercero para recuperar sus cuentas vencidas.
La respuesta puede no ser siempre obvia, ya que hay que considerar algunas cuestiones:
– ¿Qué edad y monto tienen las cuentas?
– ¿Qué tipo de cuentas son, personas físicas o morales?
– ¿Hay una experiencia especial que se necesita para entender los adeudos y la industria?
– ¿Cuántas cuentas desea asignar por mes?
– ¿Es factible negociar un plan de pagos?
En la gran mayoría de los casos es recomendable empezar las gestiones extrajudiciales a través de una Agencia de Cobranza especializada en su industria. Las agencias de cobranza son elegidas a menudo en lugar de los abogados debido a los costos y la imagen negativa que se asocia con el uso de acciones legales y comunicados recibidos directamente de un abogado.
Los costos de los servicios de una agencia de cobranza pueden variar mucho en función del volumen de las cuentas que se presentaron, el tamaño promedio de una cuenta, y la edad actual de las cuentas. La mayoría de las agencias de cobranza trabajan con un costo contingente, es decir, cobran solamente un porcentaje sobre el monto recuperado.
Si su cartera de deudas incobrables se compone principalmente de cuentas muy atrasadas con saldos muy altos, y ya ha agotado los otros medios, el uso de un abogado mercantil puede ser el mejor curso de acción.
Los costos involucrados pueden a menudo ser prohibitivos a menos que los saldos a recuperar sean altos. Esta es una de las diferencias más marcadas entre ambas opciones, ya que la mayoría de los abogados mercantiles cobran una tarifa por hora, además de los gastos relacionados con una demanda relacionada con el tribunal; las agencias de cobranza solamente cobran un porcentaje sobre la recuperación.
Debido a que las agencias gestionan sus cuentas con un costo contingente, el enfoque de la agencias es proactivo, cuentan con tecnología de punta y personal capacitado, tienen opción de reportar las cuentas asignadas a burós de crédito y la acción judicial sólo se recomienda si se considera que hay una gran probabilidad de ganar el juicio, pero sobre todo si se sabe que habrá activos para recuperar el saldo por la via judicial; en pocas palabras, si será cobrable.
Por todo lo que he expuesto es que la mayoría de las empresas con cartera sana o semi-sana inicialmente asignan sus cuentas por cobrar a una agencia de cobranza, para posteriormente asignar a un abogado aquellas cuentas que la agencia de cobranza no logró recuperar para que éste los represente en el cobro judicial, si es que el monto y las condiciones lo justifican.
¡Hasta la siguiente!